Consejos para adaptar tu casa italiana al frío
Consejos para adaptar tu casa italiana al frío

El invierno está de camino y empieza la época en la que es importante empezar a regular la temperatura de nuestra casa para poder disfrutar de un hogar cálido cuando bajen las temperaturas y evitar sorpresas en la factura por un aumento exagerado del consumo. A continuación, te presentamos algunos consejos prácticos para mantener tu casa caliente durante el invierno y no arruinarte en el intento:

  1. Revisa las ventanas y el aislamiento. Encuentra aquellos lugares por los que se escapa el calor de tu casa. Tapa cualquier grieta o agujero por donde pueda escaparse el aire caliente de dentro y entrar el aire frío de fuera. Para rellenar los huecos puedes utilizar por ejemplo silicona.
  2. Utiliza burletes para las puertas. Para evitar las pequeñas corrientes del aire que se forman en las juntas de las puertas y, en consecuencia, conseguir un aislamiento más eficaz y el mantenimiento de la temperatura, pon burletes en las puertas que den al exterior. Es un truco muy sencillo y eficaz.
  3. Elije el sistema de calefacción adecuado. Existen muchos métodos para calentar nuestro hogar: calderas de gas con radiadores, aires acondicionados, radiadores eléctricos… Para conseguir una mejor regulación de la temperatura escoge qué tipo de calefactor se adecua mejor a tus necesidades. Por ejemplo, los radiadores eléctricos son perfectos para habitaciones pequeñas sin ningún otro sistema instalado, y los aires acondicionados permiten regular la temperatura en invierno y verano, teniendo un solo sistema para todas las estaciones. Una recomendación interesante es instalar termostatos programables en las estancias con calefactores: así se calentarán solo los espacios que se utilicen y durante el tiempo que sea necesario.
  4. Utiliza los radiadores correctamente. En primer lugar, considera que, antes de encenderlos, puede ser necesario purgar los radiadores de tu casa para evacuar el aire acumulado dentro de sus conductos. Esto es especialmente necesario cuando empieza la temporada fría, después de haber tenido los radiadores inactivos por un largo periodo de tiempo. El proceso es sencillo: solo necesitas girar una pequeña llave instalada en el radiador. Una vez encendidos, evita cubrir los radiadores con objetos y colocar los muebles delante. Así aprovecharás al máximo el calor que desprenden.
  5. Mantén una temperatura moderada. Aunque sea una tentación subir la temperatura a 30 grados cuando llegas helado de la calle, evita hacerlo porque después te morirás de calor y tendrás que volver a bajar la temperatura. Para conseguir la temperatura idónea y ahorrar a la vez, lo mejor es mantener una temperatura constante.
  6. Pon cortinas en las ventanas. Y cuanto más gruesas, mejor. Las cortinas disminuyen la pérdida de calor a través de las ventanas. Déjalas abiertas durante el día para que pueda entrar la luz del sol y ciérralas al anochecer. Una mejor opción, pero más cara, es instalar una doble ventana.
  7. Cubre los suelos con alfombras. Las alfombras también ayudarán a mantener la temperatura agradable en tu casa, especialmente en aquellas viviendas con suelos que no sean parqué o tarima. Los suelos generan mucha pérdida térmica y no hay mejor manera para evitar ese efecto que poniendo una alfombra.
  8. Enciende la chimenea. Si tienes suerte de tener una chimenea en casa, ¡enciéndela! Es la manera más agradable y más barata para calentar la casa. Recuerda que debes limpiarla y revisarla cada temporada antes de su primer uso.
  9. ¡No te olvides de ventilar la casa! Aunque haga frío, es muy importante que ventiles tu vivienda todos los días para sanear el aire y evitar los malos olores. No te preocupes, será suficiente con dejar las ventanas abiertas durante 5 minutos.

Ahora ya estás preparado para el invierno que se acerca y para disfrutar de los días fríos de esta época del año desde la comodidad y calidez de tu casa.